Nuria Camacho, Jaime Vega y Roberto García en rueda de prensa. | PdE
Nota de prensa
El examen realizado desde que el nuevo gobierno local comenzó a rodar desvela graves anomalías en los contratos municipales que exigen una inmediata corrección, al afectar a la calidad de los servicios y a los intereses que debe defender el Ayuntamiento como poder público.
Si en el Pleno del pasado mes de julio, el alcalde denunciaba al gobierno local de haber incurrido en graves anomalías en la contratación de distintos servicios y que, en el caso del Natural Sonora, afectaba a la falta de control sobre las entradas y el dinero de la taquilla que debía reintegrarse a las arcas municipales; el estudio realizado por los LIBERALES revela que el nuevo equipo de gobierno no es ajeno a esos vicios en la tramitación.
La dejadez en la recuperación o, cuando menos, en la aclaración del destino dado al dinero municipal, obligó al LYM a indagar sus causas y comprobar que las anomalías denunciadas solemnemente ante el pleno eran convalidadas cuando interesaba. Así verificó, entre otros extremos, uno significativo: un mes antes de hacer esa grave denuncia en el Pleno, la Alcaldía había aprobado el pago por la firma del libro ‘Gigi Beret y compañía’, pese a la inexistencia de contrato previo, tal y como había sido expresamente advertido por el Interventor.
Ponen otro ejemplo. El contrato para aprovechar las dehesas Boyal y Matadero por importe de 192.864 euros no pasó por el Pleno y ha sido denunciado judicialmente por un licitante. El licitante pidió el expediente y fue entonces cuando, para convalidar los errores advertidos, el equipo de gobierno pidió convalidar la adjudicación en una Comisión Informativa que resulta incompetente para tratar estos asuntos. Se advirtió y se pidió que se tramitara correctamente en evitación de ulteriores reclamaciones. El alcalde reconoció que el LYM tenía razón, pero que lo dejaba como estaba. Así lo dejó. Ahora, tenemos la denuncia en el Juzgado.
Y uno más. El contrato para la Fiesta del Terror: en las redes sociales desde el mes de septiembre se viene anunciando por el Ayuntamiento, Max Audio y NavalParty su celebración (Scary NavalParty’), antes de que el 6 de octubre se licitase el contrato. Como se ha publicado la confirmación de los dos artistas que se demandan en el contrato antes terminar el plazo para presentar las ofertas. Como era de esperar, sólo Max Audio y NavalParty han concurrido a ese contrato; trasladando unas importantes notas de desconfianza al respecto.
Estas disfunciones deben ser corregidas a través de la implantación de un Servicio de Contratación dotado de personal funcionario cualificado capaz de absorber las necesidades de la ciudad y sus vecinos, conforme a las prioridades que establezcan por el equipo de gobierno o el Pleno, y bajo los principios de legalidad, libre concurrencia, que garantice la libre competencia. De ahí que los LIBERALES pidan el aumento de plantilla para evitar tanto la inseguridad jurídica como los graves perjuicios que una deficiente tramitación puede acarrear a nuestro Ayuntamiento.